Taller de Padres, 5 de noviembre
Taller de Padres II
Sábado 5 de noviembre de 2016
Docente: Carolina Rodríguez
Esta sesión, fue la primera para muchos de los nuevos integrantes en el grupo, ya que se fueron incorporando después del inicio del módulo. Carolina inició pidiendo a los participantes que pensaran en la siguientes preguntas: ¿Qué espero de esta sesión? y si yo hiciera una escultura para presentarme, ¿Cuál sería?. Después de esto, cada uno se presentó ante el grupo y posteriormente, como al inicio de cada taller, se saludaron con los tobillos, con los codos, con los ojos y con otras partes del cuerpo. Luego se sentaron en círculo y los padres con más experiencia en los talleres, hablaron de su desarrollo en la Fundación, a su vez los nuevos comentaron sus expectativas.
Algunos de los comentarios al respecto fueron los siguientes:
- Me llevo enseñanzas y aprendizaje personal.
- En estos talleres me doy cuenta que el sentido de mi vida cambia, me siento más libre y entiendo mejor el entorno y a mis hijos.
- Despertar en mi conciencia, entender a mi familia y mi hija y el cambio de conductas es muy ilustrativo.
- He aprendido a ser más tolerante y relajada, veo a mi hijo más tranquilo, comparte más conmigo.
- He empezado a conocerme un poco y ver que debo de cambiar.
- He aprendido a hacerme escuchar, antes me daba temor aunque sabía que estaba bien; también soy más tolerante; mi hijo se expresa más.
- Mi experiencia ha sido agridulce, lo más significativo es el espejo de las historias de mis compañeras; ver cómo el pasado de los niños afecta en sus conductas; la ganancia del taller es darse cuenta.
Algunas de las expectativas fueron:
- No sé de qué se trata, pero por lo que escucho es para entenderme y entender a mi hija; siento que es importante hacer algo por nuestros hijos desde que te das cuenta, el saber que estás buscando soluciones es dar un paso adelante.
- Espero enriquecerme con sus historias. quiero ver qué es lo que yo traigo que no he podido soltar y poder ayudar a mi hija.
Después Carolina comentó las reglas del taller:
- Compromiso y no faltar.
- Lo que aquí se dice,, aquí se queda.
- No es bueno dar nombres en los ejemplos que comenten.
Luego de esto, Carolina pidió al grupo que recordaran el trabajo que se había realizado en la sesión anterior, así como la tarea pendiente, que consistía en pensar en los objetos que podrían servir como «defensa» o como «elementos que evitan el avance».
Carolina: Aquellos que no vinieron la sesión pasada y los nuevos, van a pensar en el objeto que representa aquello que no les permite avanzar… Iremos hacia nuestras profundidades para conocer nuestra sombra… Hay que reconocer lo bueno y lo malo en nosotros para trascender…
Posteriormente, Carolina platicó al grupo el mito de Hércules y preguntó lo qué pensaban acerca de la primera prueba, el León de Nemea.
La prueba representa el simbolismo de ir a las profundidades, Hércules tenía en él la naturaleza de no tener miedo, él se sentía seguro de sí; significa entrar y salir, lo que implica valor, esfuerzo y lucha.
A continuación Carolina habló del la captura del Can Cerbero y se habló sobre que solo nosotros mismos podemos hacer el cambio, nadie más lo hará por nosotros.
Al finalizar el análisis de los mitos de Hércules, se realizó un ejercicio de meditación.
Carolina: Imaginen que flotan como un avión, lentamente observan los colores sienten la temperatura y los olores… Escuchan al rededor, observan varios caminos… Toman el camino hacia la profundidad, les entregan un anillo mágico, que al ser frotado permite que salgan de la profundidad, ustedes van con toda la protección acompañados… Lentamente, empiezan a caminar.. Ven a lo lejos muchas casas y entran a la primera… Es una casa antigua que tiene un letrero que dice vivencias, semejantes al primer y segundo trabajo de Hércules… Lentamente abren la puerta y entran a una antesala en donde hay un libro y hay una pluma, es un libro rojo que tiene su nombre… Lentamente van a abrir ese libro y van a observar esa hoja en blanco y que aparezca la tarea que hoy tienen que realizar, van a preguntarse si hoy traen su coraza puesta y si están dispuestos a quitársela hoy, sabiendo que van a entrar con su anillo mágico… Decidan si pueden entrar quitándose esa coraza…
Carolina: Piensen en las escenas que los han acompañado y afectado, van a elegir las que más impactaron a los otros y a ustedes… Van recordando absolutamente todos los detalles de lo que se vivió y le ponen un título… Es una escena en donde tal vez salieron muy manchados de sangre, tal vez no se veía, pero así fue… Lentamente piensen también en un subtítulo, por si ese nombre no queda claro… Pónganse de pie y acérquense a la puerta, suban las escaleras y regresan a la antesala… Abajo del subtítulo van a escribir los aprendizajes y hoy cuando se acuesten, van a regresar y van a pensar en estos… Este viaje no termina en el momento en el que acaba el taller, sino en algunos días conforme vayan emergiendo los aprendizajes… Cierren el libro rojo, dejen la pluma y salgan de la casa… Cuando salen del camino, empiezan a flotar de nuevo, protegidos, pero ahora con un título… Regresan de ese espacio de la imaginación y abren su ojo., mueven sus pies y manos y se preparan para trabajar.
Algunos de los títulos fueron los siguientes: Dolor y aprendizaje, El valor y la fuerza, Obscuridad, soledad y vacío, Renacer, Melodrama, Retomo mi libertad.
Se hicieron dos hileras de siete personas para que todos pudieran ver los dibujos de todos, cada persona se colocó en el lugar del título con el que más se identificó. El titulo más votado fue Oscuridad, soledad y vacío, así que se trabajó con la persona que lo propuso.
Carolina. – Este es el espacio de compartir que nos pasó, con esto no se trata de darle consejos. Es hablar de ustedes y es importante compartir porque si no lo hacen se van cargados.
Después del trabajo personal, se compartieron ideas, como lo complicado que puede ser tener que cuidar a alguien que se supone debía cuidar de uno o el asumir responsabilidades que no nos corresponden.
Para finalizar, Carolina comentó que esperaba que todos pudieran retomar lo aprendido, que es un proceso complicado, pero que con el trabajo personal, se puede ir avanzando, en busca de un bienestar. El taller concluyó, con una sensación generalizada de fortaleza, de aprendizaje; los padres se sintieron agradecidos por tener una vez más la oportunidad de expresarse y compartir.
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