Taller de Narrativa, 5 de agosto
Taller de Narrativa IV
Sábado 5 de agosto de 2017
Docente: Moises Mendelewicz
Durante la sesión del día de hoy, Moises compartió con las y los adolescentes un texto en el que se relataba la experiencia de una persona al conocer tres tipos de maestros; uno severo y exigente, otro obsesivo, siempre dentro de las normas y finalmente, un profesor motivante, que le enseño a interesarse sinceramente en la cultura griega. Esta lectura sirvió de preámbulo para que pudieran identificar estas figuras con su propia imagen paterna, además en la última parte del taller, pudieron externar su sentir respecto el ambiente escolar que enfrentan.
Para iniciar, Moises les explicó que en la sesión se hablaría más que en otras ocasiones, es decir, no habría movimiento.
Moises: ¿Cuál creen que sea el tema a tratar? Tienen que decir la temática…
Algunas respuestas de las y los adolescentes fueron las siguientes:
- Confusión
- Ansiedad
- Tristeza
Moises: Sí pero no, esas son emociones… ¿Qué tema sería para este taller?… ¿Qué les vendrá a dar alguien como yo?
Entonces, Moises comenzó a leer sobre la experiencia de un joven que entra a un nuevo colegio y cómo después en el transcurso de su vida escolar, va conociendo distintos tipos de maestros; como se había mencionado, del primer tipo del que se habló fue el maestro sumamente severo y estricto, tanto que llegaba a utilizar castigos físicos con sus alumnos; el segundo tipo de maestro era el obsesivo, siempre dentro de las normas y buscando que se cumplieran, pero descuidando a los alumnos; finalmente, el tercer tipo de maestro era el motivante, el que buscaba interesar a sus alumnos acercándolos al conocimiento de una manera interesante.
Moises: Esta lectura es para que hablemos de lo que pasa en la escuela… Continuó leyendo… “A los 10 años conocí a un profesor de manos gorditas y pelo engominado… Él quería ser el mejor a costa de sus alumnos, decía el que trabaje y cumpla las reglas no va a tener problemas conmigo” (segundo tipo)…
Moises continuó leyendo y llegó a un tercer personaje: “Para qué nos va a servir tener que estudiar griego, la respuesta que nos dio fue para descubrir una cultura que no desapareció con la conquista de los romanos”. De esta manera, Moisés les pidió a las y los adolescentes que hicieran una relación de los tres personajes mencionados y que comentaran cuál se parecería más sus padres; entonces, al iniciar el diálogo con el grupo, se fueron tratando diversos temas, por ejemplo una de ellos fue las relaciones familiares, en especial con respecto a los padres, tomando en cuenta el vínculo con los maestros, de los que se estuvo hablando durante la narración. Así se hablo de las dinámicas y comportamientos dentro de la familia, de la violencia en el hogar, de ausencia del padre, pero también del amor de los hijos a los papás y la importancia de los profesores en nuestras vidas.
Al regresar del receso, Moises leyó una lista de emociones y sentimientos, las y los adolescentes debían anotar en una hoja aquellas con las que se identifican más al estar en la escuela. Las emociones fueron las siguientes:
- Aceptación, abandono, abatimiento, abrumado, aburrimiento, afecto, agobio, alegría, alivio, ambivalencia, amor, ansiedad, cariño, celos, cólera, competencia, concentración, confianza, curiosidad, decepción, depresión, deserción, desgano, desilusión, disgusto, dolor, enojo, espanto, esperanza, evitación, generosidad, hastío, humildad, impotencia, inestabilidad, inseguridad, interés, intolerancia, ira, irritación, justicia, manipulación, menosprecio, miedo, nostalgia, odio, optimismo, orgullo, rabia, rebeldía, recelo, rechazo, regocijo, rencor, repudio, resentimiento, respeto, resignación, satisfacción, seguridad, serenidad, soledad, sorpresa, suficiencia, sumisión, temor, templanza, terquedad, terror, timidez, tolerancia, traición, turbación, venganza y vergüenza.
Algunas de las emociones percibidas por las y los adolescentes fueron las siguientes:
- Temor, timidez, templanza, aburrimiento, aceptación, resentimiento, seguridad, soledad, sorpresa, vergüenza, traición, nostalgia, miedo, justicia, interés, humildad, generosidad, curiosidad, ira: resultado final, 10 positivas y 8 negativas.
- Turbación, abrumado, alivio, rebeldía, respeto, vergüenza, optimismo, orgullo, inseguridad, esperanza, evitación, depresión, confianza, competencia, concentración, agobio, ansiedad, timidez: resultado final, 13 positivas y 11 negativas.
- Timidez, esperanza, curiosidad, competencia: 3 positivas y 1 negativa.
- Aburrimiento, alegría, ansiedad: 1 positiva y 2 negativas.
- Temor, timidez, rebeldía, soledad, miedo, hastío, alegría: 1 positiva y 6 negativas.
- Temor, timidez, aburrimiento, templanza, aceptación, resentimiento, seguridad, sorpresa, soledad, traición, nostalgia, miedo, justicia, interés, humildad, generosidad, curiosidad, ira: 9 positivas y 9 negativas.
- Satisfacción, serenidad, sosiego, decepción, alegría, timidez, abrumado, ansiedad, nostalgia: 4 positivas y 5 negativas.
- Rabia, turbación, timidez, abrumada, aburrimiento, recelo, rechazo, rencor, repudio, resentimiento, sumisión, vergüenza, traición, odio, manipulación, menosprecio, miedo, inseguridad, inestabilidad, impotencia, hastío, enojo, espanto, disgusto, desgano, desilusión, depresión, decepción, cólera, agobio, soledad: 33 negativas.
- Regocijo, respeto, seguridad, suficiencia, tolerancia, optimismo, interés, confianza, cariño, alegría, afecto: 11 positivas.
Para continuar, algunas y algunos adolescentes compartieron de manera individual, su experiencia en el ambiente escolar.
Moises: ¿Cómo es la situación en la escuela?
- Tengo problemas en casa y no me concentro, los maestros dicen que es para llamar la atención, el maestro de matemáticas me saca del salón, tengo una mala relación con él; me cae mal porque que dice que sólo quiero llamar la atención; no me río de sus chistes.
- Procuro no hablar con mis compañeros, se burlan todo el tiempo de mí o de lo que me gusta, traté de socializar pero no funcionó, inventan cosas de mí y todo el tiempo son abusivos para los trabajos.
- La emoción negativa en la escuela es decepción, pero también a veces siento serenidad y sosiego.
Posteriormente, Moises mencionó cómo es que percibe la relación con cada integrante del taller, luego pidió a uno de los adolescentes que hiciera lo mismo.
Moises: Todos necesitamos desarrollar algo y tenemos cualidades más desarrollarlo… ¿Qué es lo que quisieran desarrollar?
Así, algunas de las cualidades que mencionaron las y los adolescentes fue lo siguiente:
- Saber cómo concertar una relación de amistad sana y que creo que odio las relaciones de pareja.
- Confianza.
- No lo sé.
- Confianza, dejar lo de los abrazos atrás, yo intento abrirme nuevamente pues en algún momento me traicionaron.
- Tolerancia.
- No es la timidez, porque me sirve de defensa, soy callado hasta que confió en alguien.
- Controlar mi ansiedad a partir de la relación con la comida.
- Me gustaría perder el temor a hablar en público.
Moisés: Tenemos que trabajar en reforzar nuestro yo para que si alguien nos decepciona, la vida siga pasando… Ya tenemos sesión llena para la próxima, algunos de sus compañeros contarán unos cuentos y haremos trabajo corporal…
De esta manera el taller concluyó, fue un momento de reflexión y de diálogo, de compartir historias y emociones, se habló de un tema tan importante en la escuela como lo es la relación que tenemos con nuestros maestros y que a lo largo de la vida nos encontraremos diferentes tipos de guías; asimismo fue sumamente interesante relacionar este tema con el de los padres, ya que finalmente son nuestros compañeros de vida que nos muestran el camino; además fue beneficioso poder hablar de emociones hacia el final de la sesión, ya que muchas veces no sabemos qué es lo que sentimos, así que lo podemos ir nombrando.
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