Taller de Valores, 1 de junio
Taller de Valores IV
Sábado 1 de junio de 2019
Docente: David Cuevas
Durante la sesión de hoy, las y los adolescentes realizaron un exhaustivo trabajo físico y emocional para descubrir las características opuestas a su persona, a partir de ello, pudieron generar movimientos individuales específicos para crear una narrativa sobre aquel personaje. Cada uno presentó su “antónimo” y su verdadero “yo” al grupo.
Iniciaron haciendo calentamiento y estiramientos de espalda y extremidades, después de esto se sentaron en un círculo.
David: ¿Cómo les ha ido?, ¿alguna vez se han enamorado?
- Sí.
- Mi novio está enojado conmigo.
- Yo he tenido de todo.
- Enamoramiento bonito una vez, ahorita sí me siento enamorado también.
David: Entre las emociones que más disfruta el ser humano se encuentra el enamoramiento… Este taller se trata de autoconocimiento, piensen cuál sería su antónimo, cómo son… Vamos a hacer narrativas corporales, lo que hemos hecho es dramaturgia corporal, ¿saben lo que es?… Se le llama así a quien escribe obras teatrales… Tu antónimo te va a dar una enseñanza para que tú trabajes más como ser humano, dentro de la ficción vamos a crear un otro yo… Vamos a trabajar eso con el cuerpo…
David: Empezaremos haciendo una recapitulación de la mañana, recuerda todo lo que hiciste desde que despertaste… Te acuestas y te arrastras por todo el salón y llagas a la pared, te vuelves un muégano con todos tus compañeros… Van a pasar de uno en uno para hacer una preparación de la dramaturgia corporal… Voy a desplazarme acariciando el piso, sin ninguna tensión, voy a una posición fetal y hago movimientos que vayan de la contracción a la expansión… Conecta lo que piensas con cómo funciona tu cuerpo, tienes que buscar más sensaciones, busca lograr una inteligencia corporal…
Así, se arrastraron por todo el salón, al encontrar un cuerpo levantaron la cadera y se apoyaron de los codos para permitir que alguien pasara por el hueco que se generaba con el cuerpo, jugaron con esas formas e intercambiaron el rol. Pasaron por parejas al centro a realizar el ejercicio, luego iniciaron una sesión de masaje, empezando por la cabeza, rostro, sienes, quijada, pómulos, barbilla, orejas, seguido del cuello, pecho, abdomen, manos, dedos, uñas, luego piernas, rodillas, tobillos y finalmente dedos del pie. Cambiaron de lugar y tomaron unos minutos de relajación con música de Bach.
Al concluir, David pidió que se juntaran hombro con hombro en un círculo, en el que lentamente cambiaron el peso entre los pies.
David: Vamos a iniciar nombrando antónimos físicos, antónimos emocionales… ¿Con qué emoción están ahorita, cómo están hoy?… Deben construirlo, ¿si ese antónimo existiera, cómo se llamaría?… Por ejemplo el mío se llamaría Antonio, ese antónimo va a tener una historia, un nacimiento y vamos a narrar esta historia de vida, la vamos a ver corporeizada… Vamos a iniciar como con el lenguaje de sordos, vas a construir solamente con manos y torso… ¿Cómo lo voy a hacer?
David dio un ejemplo de la narrativa corporal, a partir de éste las y los adolescentes tuvieron unos minutos para armar la narrativa de su antónimo y presentarlo individualmente al grupo. Después de esto, David dio otros minutos para que agregaran a su propuesta más posibilidades con movimiento de torso y brazos.
Los antónimos y su descripción fueron los siguientes:
- Alex, persona irracional que tiende a la violencia.
- Martha, persona con sobrepeso que se hace la víctima.
- Layla, chica segura.
- Israel, hombre musculoso con traje.
- Violeta, joven con sueños, camina en la cuerda floja cae en consumo de drogas alcohol y atracones.
- Will, gangster, bailarín de hip-hop.
- Javier, luchador.
- David, aparentemente seguro de sí, hace ejercicio, bebe, maneja y choca.
- Gustavo, una especie de soldado o policía, con chaleco o protección anti balas.
David: ¿Qué les parece su otro yo?… Me pregunto si ese antónimo también está un poco en ti… Ponte de pie, el otro yo ya lo vimos y descargamos energía de algo que supuestamente no somos, se determinó sobre tu mente… Ahora vas a describirte a ti, quisiera ver otros movimientos, no debe parecerse al antónimo…
Presentaron su verdadero yo y David preguntó con quien se quedarían, con el antónimo o con su yo, algunas ideas compartidas fueron las siguientes:
- Mi otro yo hizo lo que a mí me hubiera gustado ser, pero me quedo con lo que tengo ahorita, porque lo que tengo me satisface.
- También me quedo con esta danza, porque mi anti-yo es todo lo que me desagrada.
- Hay similitudes, mi otro yo ha hecho más y no ha estado con gente que le agrade, pero a mí sí me gusta la gente que conozco.
- Muchas diferencias, estoy más en la primera, me gusta más.
- Este piensa más las cosas, me quedo con este porque a pesar de que a veces he tomado malas decisiones, aprendo de ellas.
- Me prefiero a mí misma porque la otra es muy consentida y se cree mucho.
- Me quedo conmigo porque soy autentica y la otra era una hipócrita.
David: Lo importante es la enseñanza que te estás dando a ti, yo los prefiero a ustedes… Cerramos con un abrazo…. Para concluir, cada día y cada minuto podemos descubrir tantos yo que lo importante es que te quedes contigo y debemos valorarlo… Les pido que se conecten con ello, normalmente nos ponemos una careta, la idea es que seamos auténticos, no hay nada como conectarse con uno mismo, reconcíliense con ustedes…
De esta forma el taller concluyó, fue un espacio de aprendizaje personal y en el que las y los adolescentes pudieron conectarse con su yo y a la vez, con la todo lo que consideran opuesto a ellos, su anti-yo, conocimiento que les permite reafirmarse y seguir en el arduo camino del propio entendimiento.
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